martes, 12 de julio de 2011

VIVIR EL DÍA QUE PASA







óleo de Darío Regoyos



"Antes no creía en nada, y ahora ni eso..." ( Forges)


Elegimos en el caleidoscopio de la vida los colores con que queremos pintar la nuestra para que valga la pena.
Mientras tanto, la ruleta rusa del vivir se encasquilla mil veces en los entresijos de la suerte, y hay quien lo da todo por un momento de gloria y  quien ni siquiera nada para mantenerse a flote, o quien se viste de blanco para casarse con su asesino.
Según Karl Popper, si una cosa tiene la posibilidad de ser cierta es porque también la tiene de ser falsa, hay muchos tipos de realidades y es imposible predecirlas.
Cuando nuestro tiempo ya medio pasó, cuando el futuro se  achica y cada vez nos parecemos menos a lo que queríamos ser, no tiene sentido trazar rutas para ir a sitios que a lo mejor ni existen.
Ya no es necesario ganar, convencer, destacar o tener siempre la razón, ya no hace falta preparar un porvenir, ya se han subido todos los peldaños que llevaban al sosiego.
La madurez era eso, tan solo vivir, un día cada vez, aprender a quedarse solo por dentro, a amar y a amarse, a callar y a escuchar, a no extrañarse de nada, ni de lo que se esperaba y no llegó, ni de lo  que llega sin esperarse.
Cuando ya naufragaron todas las certezas hay que escapar aprisa de la zozobra, que la vida es corta, seguir deshojando con filosofía la margarita de nuestra historia:  me quiere, no me quiere; me quedo, no me quedo; me marcho, no me marcho; me olvido, no me olvido; me importa, no me importa; vale la pena, no vale la pena...y así.
Si podemos sonreir es porque todo va bien, la mejor coartada ante el desconsuelo es tender la mano al desconsuelo ajeno, darnos, querernos y perdonarnos, valorar lo que se tiene, perseguir lo más auténtico y disfrutar de las pequeñas cosas.

 
..."Y de nuevo el aire, que le faltara tanto tiempo, le entró fresco en los pulmones" ( Fernando Pessoa )

 



óleo de Renoir



4 comentarios:

  1. Valorizar o que se tem.
    Procurar a autenticidade.
    Desfrutar das pequenas coisas.
    Não sei se traduzi bem, mas é a melhor filosofia de vida.
    É,muito sinceramente ,aquela que tento seguir cada vez mais.

    Um abraço
    Isabel

    ResponderEliminar
  2. Me quedo con que ya no tiene sentido trazar rutas para ir a sítios que a lo mejor no existen.

    ResponderEliminar
  3. Maria minha querida, aí vamos nós, descomplicando a vida e compreendendo a cada passo como as coisas são. No final sempre dá certo.

    5 bjs - das suas amigas, dançando.

    ResponderEliminar
  4. Hermoso y muy cierto, María.
    Si de jóvenes supiésemos lo que sabemos ahora, probablemente no seríamos jóvenes...
    Un abrazo muy amigo, Manuel

    ResponderEliminar