domingo, 2 de junio de 2024

SOLOS O EN COMPAÑÍA









                                                                                                  Juan Gris

 


En boa compañía o sin nadie que nos dé calor, nuestra pequeña vida transcurre inexorable en medio de la inmensidad... Algunos están llenos de certezas y con mucho a que agarrarse para iludir la incertidumbre, otros solo encuentran preguntas sin respuesta. Entre tantos millones que somos, hemos sido y seremos, siempre habrá los insatisfechos crónicos y los que son felices con muy poco. Cada uno busca donde puede el sentido a todo esto, en ideologías, ciencias exactas, filosofías, religiones, arte, narcisismo, poder, fama, dinero, trabajo, ruido, silencio, compañías, soledades, amores, odios, culto al cuerpo, al bien, al mal, a ser víctima, a ser verdugo...cualquier asidero que sea  refugio para no perderse del todo, porque no encontrarse a sí mismo es el peor de los desencuentros. 
Cada vida es como una mesa: lo importante es que las cuatro patas estén equilibradas, caso contrario  todo lo que hay arriba se tambalea y cae hecho pedazos. Las bases de esa estabilidad son esencialmente la salud, el amor, la economía y la suerte — si no hay suerte se puede derrumbar lo más grande. 
Luego cada uno se monta su circo y se pone las etiquetas que más le gustan, las cosas tienen solo la importancia que les damos y cuanto más años vivimos, más relativizamos todo. Vamos aprendiendo que los incendios se apagan mejor cuando empiezan y aun son pequeños, y que la felicidad depende mucho de hacia donde miramos y de lo que pedimos a la vida.
La plenitud es breve, igual que el sufrimiento, y en medio de este caos organizado hay que intentar sacarle partido a todo lo que se pueda .

Temos, todos que vivemos,
Uma vida que é vivida
E outra vida que é pensada,
E a única vida que temos
é essa que é dividida
Entre a verdadeira e a errada. 
     Fernando Pessoa