jueves, 1 de octubre de 2020

TIEMPOS DIFÍCILES






obra de Henri Matisse



En estos tiempos raros que estamos viviendo, con la sombra del sufrimiento, la impotencia y el miedo alargándose por todo el planeta, sale a relucir una cierta mentalidad que ha estado siempre allí desde cuando algunos humanos empezaron a volverse inteligentes, a tener consciencia del mundo y de sí mismos, a ser cuerdos, sensibles, solidarios, creativos y así: casi simultáneamente habrán surgido los que serían y siguen siendo todo lo contrario, los llamados hoy negacionistas, esos personajes que menosprecian la verdad, la ciencia, los hechos contrastados y el esfuerzo colectivo. Ahora "niegan" por ejemplo la pandemia y el uso de mascarillas, igual que han negado a través de la Historia todo lo que no les gustaba o no entendían.  Siempre odiaron los cambios que no les favorezcan personalmente y a los que se oponen con intransigencia y ferocidad en cada momento, en el presente como en el pasado. Pueden, han podido y así seguirán, cuestionar absolutamente todo, las vacunas, el cambio climático, el Holocausto judío o armenio, la esfericidad de la Tierra, el sistema solar y un larguísimo etcétera de despropósitos que siguen encontrando eco en un también amplio colectivo de descerebrados, prepotentes y provocadores. Nunca son teorías basadas en un mínimo de conocimiento y honradez, solo comportamientos distópicos, impresentables, con los que cambiar una realidad incierta e insegura por mentiras cobardes y más cómodas, hechas a su medida. Esa gente, a la que les encanta provocar y sentirse más lista, necesita a su vez, para propagar falsedades y enfrentamientos, una legión de seguidores de su misma calaña e ignorancia, carne de cañón para las sectas o incluso para dar voz y voto a algunos partidos políticos que deberían estar proscritos. No cabe duda de que en desastres tan devastadores como el COVID19, siempre emerge lo mejor pero también lo más bajuno de que cada ser humano es capaz.
Menos mal que cuando la vida se nos complica, la mayoría tenemos una capacidad de aguante muy superior a la que creíamos, dice Manuel Vicent que los problemas se ven más grandes de lejos que de cerca, y así es. 
En cualquier caso nunca deberíamos olvidar que no somos nada los unos sin los otros.

    No te rindas, aun estás a tiempo
    de alcanzar y comenzar de nuevo,
    aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,
    liberar el lastre, retomar el vuelo.
    
    No te rindas que la vida es eso,
    continuar el viaje,
    perseguir tus sueños,
    destrabar el tiempo,
    correr los escombros y destapar el cielo.

       Mario Benedetti

4 comentarios:

  1. Poema positivo e encorajador, sem dúvida, este de Mario Benedetti, mas eu estou a sentir-me, pela primeira vez, apreensiva e preocupada com as recentes mudanças para pior.
    De repente, está tudo a acontecer muito rapidamente, como se o céu estivesse a cair sobre as nossas cabeças...

    Bom resto de domingo, María.
    🍁🍂

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  2. Ânimo, a incertidão complica as coisas, mas não há que perder a esperança de que tudo passará...
    Feliz semana.

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  3. Como tens razão, Maria! Quanto me faz mal pensar nessas aberrações fruto da ignorância e da teimosia de alguns e da perversidade de outros. Veremos o que aí vem, mas não vai nada ser fácil. Penso em Espanha, em vocês, em Portugal, nos amigos que todos temos por aqui e por ali, os amigos nos USA com o desonesto e falso Trump, nos meus amigos de Israel, também sob a pata de um idiota que apenas quer não ir para a cadeia... Enfim!
    É como dizes: "cuando algunos humanos empezaron a volverse inteligentes, a tener consciencia del mundo y de sí mismos, a ser cuerdos, sensibles, solidarios, creativos y así: casi simultáneamente habrán surgido algunos que serían y siguen siendo todo lo contrario, los llamados hoy negacionistas, esos personajes que menosprecian la verdad, la ciencia, los hechos contrastados, el esfuerzo o la honradez."
    Perigosos! Tem cuidado contigo !

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