El Coliseo Romano se inauguró en el año 80 d. C. con unas celebraciones que duraron 100 días, en las que murieron decenas de gladiadores y de fieras para regocijo general. Es ya solo una fecha más, como tantas otras, perdida en un antes y un después de ignominias que parece que van a menos en número pero no en saña cruel.
Seguimos igual de pequeños, seguimos durmiendo con las conciencias igual de tranquilas, como el ex dictador argentino Videla, que acaba de morir en la cárcel con 87 largos años sin haberse arrepentido de haber puesto en marcha, apoyado por la iglesia y el gran capital, un terrorismo de Estado que echó al mar desde aviones más de 30000 personas vivas, convirtió los cuarteles en centros de tortura, robó cientos de bebés a las madres encarceladas, etc. etc.
Somos tan pequeños que solo vemos lo que queremos ver, hasta que a veces un iluminado o iluminada nos arranca la venda de los ojos y nos unimos de una puñetera vez para cambiar un poco de rumbo.
Somos tan pequeñitos que estamos renunciando al agua pura, al aire puro, dejamos que se mueran todas las abejas o todas las ballenas, o seguimos adornándonos con una bonita ropa made in Bangladesh, por ejemplo.
Así vamos haciendo la Historia, con la conciencia siempre tan lavada y la sonrisa tan blanca, todo lo más a que alcanzamos es a pedir perdón por el mal que causaron otros, como Juan Pablo II por los errores cometidos por la iglesia a lo largo de siglos. ¡A buenas horas, mangas verdes!
Ojalá yo pudiera vestir mi alma de rosa con ropa ligera y limpia, para volar como un halcón.
óleo de Edmond F. Aman-Jean |
ENcantado de volver a leerla con el placer y el cariño de siempre. La foto de arriba nos trae el dolor inmenso de ser madre de un ser desgraciado, ya sea un gladiador en siglos pasados, un trabajador explotado en condiciones extremas, como en el caso de la ropa confeccionada en el tercer mundo, donde pasó ahora el terrible derrumbe con cerca de 800 muertos, o los asesinados y torturados por gente impresentable que se hace con el poder, en Argentina o en muchas partes del mundo todavía.
ResponderEliminarLe deseo una semana estupenda, a pesar de los pesares, querida María.
Un abrazo.
Manuel
Sim, Maria! Tens toda a razão em falares destas misérias, desta sujidade que nos rodeia e para a qual nunca consuguimos arranjar remédio senão a indignação que -parados, como tantos "mínimos" ficam- não leva a nada!
ResponderEliminar"Somos tan pequeños que solo vemos lo que queremos ver", dizes bem. Somos "mínimos" enquanto não abrirmos a boca para falar e para gritar a miséria e o nojo que por aí vai! Sim, o Bangladesh martirizado sempre, explorado até ao tutano! As grandes marcas que para VENDER insistem nestas condições de trabalho, segundo dizem para poder "vender barato" à "massa" inconsciente do preço que afinal pagou "baixo" sim - mas á custa do quÊ???...
E os tiranos que morrerm na cama!
"ignominias que parece que van a menos (...) Seguimos igual de pequeños, seguimos durmiendo con las conciencias igual de tranquilas, como el ex dictador argentino Videla, que acaba de morir en la cárcel con 87 largos años sin haberse arrepentido."
Não, não nos calaremos!
vamos continuar a gritar!
UM beijo grande. Imagens dolorosas e belas!
Que podemos nós, individualmente fazer?
ResponderEliminarColaboro sempre que posso, em campanhas honestas, mas mais...
Era preciso vontade de quem manda, união de todos os povos...mas quem quer saber disso?!
Maria, o mundo muda muito devagarinho!
Folgo ver-te de volta!
Um beijinho
(deixei-te aqui um recado, mas parece que não seguiu!)
Tens razão, Chabela, o mundo muda muito devagarinho, e o pior de tudo é que vai ficando pelo caminho muito sofrimento que se podia evitar. Nós não podemos fazer muito, ao fim e ao cabo estamos do lado das víctimas, não dos verdugos. Petit à petit!
EliminarNão vi nenhum recado, espero que não fosse importante. Estive fora uns dias.
Beijinhos
Não há dia, em que quem luta pela igualdade e pelo respeito, acorde com olhos cheios de lágrimas. A vida tem que ser leve, porque quando olhamos para os lados, o fardo é bem mais pesado. Por cá seguimos sonhando e realizando possibilidades, sempre lembrando do EU SOU de Maria.
ResponderEliminarbj grande
Com vocês fico sem palavras, porque o meu respeito é tão grande!
ResponderEliminarÉ muito certo que olhar sempre para trás nos ajuda a seguir para a frente, e temos a obrigação de ser felizes se é possível, que para isso nos paríram a todos.
Abraços e beijos
Asi es...
ResponderEliminarObrigada Manuel pela sua visita, é uma honra.
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